Buena, bonita y barata
Una prueba un poco diferente a todo lo que viene siendo habitual, en un pueblo un poco desconocido cercano a Torrelaguna.
Con una lista de inscritos cercana a los 300 corredores era lo justo para no sentir el agobio de las grandes carreras, y también para no sentirte solo en ningún momento del recorrido. Un recorrido que discurría por pistas en su mayor parte, casi todo el tiempo en muy buen estado, y salpicadas con un par de repechos que rompían la tendencia plana de la carrera.
Sin duda recomendable volver por allí, puesto que es de esas carreras en las que sientes que no te falta de nada, ni siquiera el apoyo de los pocos habitantes del pueblo que, unidos a los familiares de los corredores, dieron ambiente a la carrera.
En el aspecto deportivo, pues otra más a la que fui con ánimos de acumular kilómetros sin más pretensiones. Hice unos 8 antes de la carrera a ritmo muy suave y reconociendo el terreno, y después los 15 de la carrera en una hora justo, a 4'/Km y con buenas sensaciones.
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